Por muchas cosas que haya oído sobre la isla griega de Hydra, nada podrá evitar la sorpresa al verla por primera vez. Una ciudad isleña de belleza sin igual. Al recorrer la isla por sus características callejuelas, se puede disfrutar de un paseo a través de sus terrazas y patios adornados por la florida vegetación.
La isla se caracteriza por tener un puerto de forma circular, que se ve adornado por las velas de los yates que disfrutan de la navegación alrededor de la isla. Sus colinas rocosas se encuentran decoradas por construcciones de casas de uno y dos pisos en forma escalonada. Estas casas de arquitectura tradicional de la zona impresionan desde el primer momento que se les ve.
Hydra es una isla griega a corta distancia de la ciudad de Atenas, desde el puerto de Pireo la separan 37 millas náuticas lo que se traduce en 3 horas de viaje en barco. La isla también se encuentra cerca de las islas griegas de Egina, Methana, Poros, Spetses en el Golfo Sarónico.
La isla de Hydra cuenta con una extensión de 50 kilómetros cuadrados y de un perímetro costero de 55 km., es una isla montañosa cuya montaña más alta de nombre Eros se encuentra a 593 metros sobre el nivel del mar. Su población es de menos de 3000 habitantes.
Historia de Hydra
La civilización más antigua hallada en la isla es la micénica. Más tarde Hydra fue conquistada por Ermioni que a continuación la vendió a los Samios. Los años posteriores transcurrieron sin que ocurriera nada significativo hasta el siglo XVII d. C. cuando la isla comienza adquirir poco a poco una poderosa flota comercial para llegar a ser una de las más importantes durante las Guerras Napoleónicas. Por aquellos años, la población de la isla era de aproximadamente 30.000 habitantes, de los cuales muchos eran personas que buscaban refugio en tiempos de guerra.
Por mucho tiempo fue conocida la flota naval de los hydreos, que contribuyó junto a la flota de la isla griega de Spetses en la guerra contra los turcos. Las hazañas de heroísmo de sus tripulaciones se conocieron en toda Europa. Los marineros isleños aparte de sus barcos utilizaban entonces los llamados “pirpolika”. Se trataba de pequeñas embarcaciones llenas de explosivos que iban durante toda la noche hacia los barcos de la flota turca, y que al estallar los destruian. La superioridad de los hydreos y sus compañeros de guerra, fue el factor principal del éxito de la Revolución Griega.
Qué ver en la isla griega de Hydra
En torno al puerto de la isla de Hydra se pueden observar construcciones de casas nobles de gran tamaño, construidas por arquitectos genoveses y venecianos por el año 1821. Un recorrido por la isla nos llevará a la Escuela de Bellas Artes de Bulgaris, donde en la actualidad se encuentra la Escuela Superior de Marina Mercante. Al recorrer el interior de estos edificios se puede observar de cerca la decoración y sus muebles de antaño, sus suelos de mármol y la construcción de madera de sus cielorrasos.
En Hydra, se puede ver cerca de la bahía cañones antiguos de la época bélica en que se vio envuelta. En medio del muelle muy cerca del mar se encuentra el Monasterio de Teotoco, que en la actualidad es su principal catedral. En el patio de la iglesia está la estatua del héroe local Andreas Miaúli.
No se puede pasar por alto un paseo por la parte alta de la isla, caminos y senderos nos llevan a lugares de donde se puede observar gran parte de la isla a través de una vista panorámica, desde el mismo lugar se puede contemplar una menesterosa puesta de sol. Una vista casi infinita nos llevará al horizonte mezclando colores indiscristibles donde se unen el cielo y el mar.
Para los que gustan de un turismo acuático la isla ofrece postales de singular belleza a través del color de sus aguas cristalinas y profundas, uno de estos lugares se conoce con el nombre de Spilla. También se puede disfrutar de un baño confortable en la playa de Mondraki y Vlychos en la localidad de Kaminia. El acceso a esta a tres playas se puede hacer a pie, ya que se encuentran muy cerca del puerto.
La isla de Hydra también ofrece playas de grandes extensiones como las playas de Molos y Bisti, estas quedan más retirada pero que la distancia no es problema cuando sabemos que al lugar donde nos dirigimos se convertirá en un verdadero recreo de regocijo y buena estancia.
En Hydra está prohibido el tráfico de vehículos, por lo que el acceso a las playas se hace exclusivamente en pequeñas embarcaciones.